Ya lo había hecho en 2021, en Bagno di Romagna. Andrea Vendrame lo ha vuelto a hacer, hoy, en Sappada, la tierra del biatlón, del Carnia Arena y de Lisa Vittozzi, la campeona del mundo. Si hubiera sido una competición de biatlón, la actuación de Vendrame habría sido un 5 sobre 5 en el campo de tiro, un tiro limpio.
Sus piernas también eran las de sus mejores días, después de todo, no te metes en una escapada tras 80 km de lucha sin estar bien física y mentalmente. Luego, sin embargo, en la escapada encontró a alguien que era un poco más fuerte que él en las subidas: Julian Alaphilippe, Georg Steinhauser, Jhonatan Narváez y Pelayo Sánchez, no sólo segundones, todos corredores que ya han ganado una etapa en este Giro, no por casualidad.
¿Cómo ganarles? Eligiendo el momento adecuado, moviéndose a la perfección, sin cometer errores de alcance. Bajo el aguacero atacó en el descenso de Sella Valcalda… un loco, pero también le llaman Joker por eso, no sólo porque tenga una cicatriz en la cara de un accidente de entrenamiento con un coche. Más de 30 km en solitario y yendo hacia Cima Sappada, galvanizado, incluso ganó terreno a los perseguidores. En el Carnia Biathlon Arena no tuvo que dar ninguna vuelta de penalización, fue directo a la meta de Sappada. Fue una victoria, un triunfo, tres años después de su último éxito. En el Giro de Italia Vendrame ya había ganado en 2021, incluso entonces haciendo 5 de 5 en el polígono y batiendo a corredores más fuertes que él en la subida a Bagno di Romagna.
Mañana es el doble Monte Grappa. Para los escaladores y los hombres de la general, es mañana o nunca.