Etapa 21
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Eterna y hermosa
Por segundo año consecutivo, Roma acogerá el gran final del Giro de Italia. Será una gran fiesta y probablemente un sprint. Antes de correr bajo el escenario para aplaudir a los ganadores, uno se siente gratamente abrumado por las bellezas de la Capital. Que son muchas, muchísimas. Difícil elegir por dónde empezar. El Coliseo es la superestrella de la Roma arqueológica, y uno no puede dejar de conocerlo antes de ir al Foro Imperial, un conjunto arquitectónico único compuesto por una serie de edificios monumentales y plazas, centro de la actividad política de la antigua Roma, construido a lo largo de unos 150 años, entre el 46 a.C. y el 113 d.C. A continuación se encuentran las Termas de Caracalla, uno de los complejos de baños más grandes y mejor conservados de la Antigüedad, construidas en el Pequeño Aventino entre 212 y 216 d.C., en una zona adyacente al tramo inicial de la Vía Apia. Debido a la importancia de sus monumentos, ésta ya recibía el nombre de Regina Viarum en la Antigüedad. Puede recorrerse a pie o en bicicleta, admirando algunos de los monumentos más notables de la Antigua Roma, como el Mausoleo de Cecilia Metella, las catacumbas de San Calixto, San Sebastián y Domitila, la Villa dei Quintili y la Tumba circular de Casal Rotondo.
Parques y basílicas
Menos conocido, pero de gran importancia, es el Parque Arqueológico de Ostia Antica, el segundo más grande de Italia (después de Pompeya), que se encuentra cerca del circuito que recorrerán los corredores. Éste podría ser el destino ideal para quienes deseen descubrir una joya artística y, al mismo tiempo, contemplar el paso de la carrera sin sumergirse en el torbellino de la ciudad.
Imposible, por supuesto, perderse una visita a la Basílica de San Pedro, corazón religioso de la ciudad, y a los adyacentes Museos Vaticanos, con su inestimable colección de tesoros artísticos y, sobre todo, la Capilla Sixtina. ¿Y cómo olvidar el Castillo de Sant'Angelo, uno de los monumentos más famosos y visitados de Roma, también pasto de los corredores? Desde sus terrazas o desde las aberturas a lo largo de las pasarelas exteriores, se puede disfrutar de una de las vistas más evocadoras de la ciudad.
El gran mural
Los aficionados al ciclismo también se detendrán ante el gran mural, creado para la ocasión, dedicado al Giro cerca de la estación de metro Conca d'Oro. Una novedad que no dejará de sorprender. Al igual que será agradable acercarse a la Plaza de España tras la puesta de sol para admirar el espectáculo de la Escalinata Española y la fuente de la Barcaccia coloreada de rosa. El 26 de mayo también tendrá lugar el Family Ride, un recorrido no competitivo para hacer con la familia y los amigos por las calles del centro de la ciudad por la mañana, antes de la salida de la última etapa de la Corsa Rosa. El recorrido parte de Via San Gregorio, justo bajo el arco de llegada de la etapa del Giro, y mide sólo seis kilómetros. Al alcance de todos, pues.
